Para comenzar el final de este periódo del blog. Ha estado muy abandonado y me arrepiento(?), pero después de este post (y su debido tiempo de espera) comenzaré un rediseño de contenido y apariencia con mayor planeación. No sé cuando lo haré, pero lo haré.
El microcuento a continuación se llama como el post: Final. Trata sobre los últimos segundos de vida de alguien, además de que concuerda con este post, el inicio del final para el nuevo comienzo.
Oí el invisible barullo de la luna al devorar la palpable negrura del cielo. Las estrellas gemían cada vez una nube bramaba hasta opacarlas.
La espada aulló, rabiosa y orgullosa, mientras descendía sobre mí.
La flor escarlata bailó sobre mi frente antes de caer postrada ante mí, su dueño. Floté durante horas inexistentes antes de que la gravedad me expulsase del cielo, mientras mi entorno estallaba, se fragmentaba y rugía polígonos en una señal de estática inexorable.
Oí el invisible avance del susurro de la luna silenciarse por última vez.
